Se llama Sarah Carmen y tiene una enfermedad que casi se puede considerar una maldición: el más mínimo estímulo le produce un orgasmo, desde el susurro de un secador o el ruido de una impresora. Su enfermedad se denomina Síndrome de Excitación Sexual Persistente (PSAS) y le hace tener más orgasmos en un día de los que cualquier otra mujer tiene en un año. Y su caso no es el peor: Michelle Thompson, de 37 años, llega a los 300 orgasmos diarios.
Pero este no es el único caso de enfermedad rara. En este post de XSlive puedes encontrar casos tan curiosos como el de una mujer con alergia al agua (que digo yo ¿como se duchará esta mujer?), otra que se paraliza cuando se ríe o el caso de Debbie Bird, una mujer que no soporta la tecnología (un mal que en mayor o menor medida tienen muchas de nuestras madres, novias o mujeres). Un post curioso y divertido para pasar un buen rato, y que os hará pensar en la suerte que tenéis cuando un simple catarro os deja un par de días en la cama.
Pero este no es el único caso de enfermedad rara. En este post de XSlive puedes encontrar casos tan curiosos como el de una mujer con alergia al agua (que digo yo ¿como se duchará esta mujer?), otra que se paraliza cuando se ríe o el caso de Debbie Bird, una mujer que no soporta la tecnología (un mal que en mayor o menor medida tienen muchas de nuestras madres, novias o mujeres). Un post curioso y divertido para pasar un buen rato, y que os hará pensar en la suerte que tenéis cuando un simple catarro os deja un par de días en la cama.
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